Debieron pasar
27 años para que los trabajadores de prensa de diarios, revistas, agencias de
noticias y medios punto.com pararan las redacciones y se movilizaran en reclamo
de una recomposición salarial, rechazando la precarización de los
colaboradores, por aumento del sueldo mínimo, por la conformación de una escala
única para la rama de prensa, por el reconocimiento de la antigüedad, entre
otras reivindicaciones. Si alguien pensaba que el trabajo periodístico, era un
trabajo de elite semejante a cualquier otra profesión liberal, ello sólo es imaginable
para los que firman cuantiosos contratos por afuera del “Estatuto del
periodista” o los convenios colectivos de trabajo que rigen la actividad.
El conflicto
sindical por mejorar las condiciones laborales del sector, casi no tiene
presencia en los medios por la misma naturaleza del trabajo: el empleador no
está dispuesto a difundir su propia controversia gremial. Fueron muy escasos
los medios, programas de radio y televisión que se solidarizaron con los periodistas
que el viernes marcharon frente a la sede de la Asociación de Editores de
Diarios de Buenos Aires (AEDBA), por las oficinas del diario La Nación y por la
puerta de Editorial Atlántida, La Prensa y Ámbito Financiero. Aunque esta vez
el conflicto no pasó desapercibido porque las redes sociales, medios y agencias
de información on line lograron darle visibilidad.
Si bien el
conflicto de prensa se sitúa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el resto
del país FATPREN y FETRACCOM (ver http://revistaeltranvia.com.ar/?p=4891) lograron por primera vez sellar un acuerdo de
unidad para avanzar en una lucha conjunta por el reclamo salarial y el convenio
colectivo de trabajo. Es, para las compañías del sector, mucho más fácil dar una
respuesta coyuntural al problema salarial que resolver la letra chica de un
convenio colectivo que, por las transformaciones tecnológicas, ha cambiado las
características de las funciones del periodista.
El ex Director
del diario francés “Le Monde Diplomatique, Ignacio Ramonet, de visita por la
región y en una conferencia desarrollada en la CABA habló sobre las nuevas
problemáticas de la precarización laboral. En su exposición dijo que el
fenómeno de la globalización también está generando una nueva “precarización”
en el trabajo de los periodistas. Así como la transnacionalización de la
economía permite que las empresas desarrollen su actividad productiva en
función de los países con más bajos salarios, el periodismo digital ha
incentivado a que las grandes cadenas de comunicación busquen a sus columnistas
y periodistas en aquellos países donde los sueldos son mucho más bajos. Con un
ordenador, un procesador de texto y vía internet se haya la inmediatez
necesaria para poder tener la empresa periodística en un país y a los periodistas
en otro.
El “Día del Periodista”,
a diferencia de otros años, no pasó desapercibido desde el punto de vista
gremial. Fue una jornada útil a los fines de recordar la figura de Moreno, como
fundador de la prensa patria, pero fundamentalmente para reflexionar sobre las
prácticas empresariales respecto de las condiciones de trabajo. En La Plata el Canal
Digital QM (ver http://revistaeltranvia.com.ar/?p=4591),
fue escrachado el jueves 6 de junio por los trabajadores del Sindicato
Argentino de Televisión (SAT) por no cumplir con el Convenio Colectivo de trabajo.
Periodistas, productores, camarógrafos y editores se encuentran fuera de los
encuadres legales que regulan la profesión. La empresa, denominada GRUPO CIELO,
en una forzada asociación de la relación entre el sindicato y el grupo Clarín,
buscó justificarse diciendo que se trataba de una campaña de desacreditación
por parte del grupo y el sindicato por un supuesto pedido del Grupo Cielo para
ser incorporado a la grilla de Cablevisión como canal provincial. La Revista El
Tranvía, se ha caracterizado por tener una posición favorable a la Ley de
Medios y de fuerte posicionamiento crítico frente a la concentración
multimedial, lejos está de esta revista digital revisar esa postura, por el
contrario es interés reafirmarla y señalar en este caso que la discusión salarial
en QM va por otros carriles, que tienen
que ver pura y exclusivamente con los intereses de los trabajadores de la
empresa.
El SAT,
explicaron sus delegados de base a este medio, ha comenzado a revisar a
aquellos canales de baja potencia, y programación que depende de organismos
públicos y privados, para ver si cumplen o no con lo establecido por el
Convenio Colectivo de los trabajadores de televisión. Para el SAT, la
precarización no se negocia.
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